Hay muy pocos jugadores que logran ser ellos mismos en una cancha de fútbol. Los protagonistas, hoy en día, emigran jóvenes y, a causa de administraciones frágiles y la demanda del mercado, los equipos están compuestos, en su mayoría, por adolescentes. Los chicos están obligados a tomar responsabilidades de grandes. Por lo general queman etapas súbitamente y las presiones son proporcionales a su incompleta etapa de formación. Encima, desembarcan en medio de la abundante oferta mediática y, más de uno, es hijo de padres que pretendieron ser un Maradona. Toda esa carga de presiones psicológicas, más las necesidades del directivo de turno, el técnico contra las cuerdas, y la ansiedad de la gente, provocan un combo explosivo difícil de sostener sin ayuda de un profesional.

Marcelo Roffe, psicólogo especialista en el alto rendimiento, nos contó porque se inclinó por orientar sus conocimientos a los deportistas calificados: "Es una forma de entrecruzar pasión y profesión. Yo me recibí en la Universidad de Buenos Aires en 1990, empecé especializándome en clínica en el Hospital Argerich y desde el año 1994 que trabajo con deportistas y entrenadores. Me apasiona poder entenderlos y poder ayudarlos para que se sientan más positivos, piensen más, mejor y optimicen su rendimiento. El lema de la psicología deportiva es: " siempre se puede mejorar. Trabajamos con humanos que se equivocan y tienen autocrítica y no es para locos o enfermos".

En medio de una sociedad futbolera exitista e histérica, Roffe puso énfasis en la formación de padres para sacarle presión a los chicos: "Hay que hablar mucho con los padres, tomarse el trabajo de educarlos y enseñarles. No puede permitirse que muchos digan que el que llega a triunfar es porque es huérfano. Como diciendo que el que tiene padres está presionado. En la actualidad hay un 10% de padres equilibrados y hay un 90% de padres que generan estrés y hasta provocan el abandono de la práctica deportiva de sus hijos. Y mucho de ellos no quieren que el hijo sea mejor persona a través de los valores que trasmite el deporte, sino que buscan realizar sus propias frustraciones o "salvarse" económicamente. Es por eso que decimos que el cementerio del deporte está lleno de talentosos y los adultos tenemos mucho que ver".

La demanda del mercado actual sumado a la tradición exportadora de nuestro fútbol, ha provocado que por necesidad o costumbre, los equipos de hoy estén compuestos por futbolistas adolescentes. "Es un tema muy complejo. Las reglas las impone el mercado y vivimos en un país del tercer mundo que, aunque mejoró mucho, genera la mayor producción de semillas futbolísticas del planeta. hay apuro por emigrar. Sobre todo en el entorno, familia, representante y eso hace que el jugador se vaya sin saber donde, si lo pidió el entrenador o un dirigente, cuánto va a cobrar, ni que idioma se habla. Ese apuro por irse para asegurar el futuro, hace que queden en 1era. división lugares vacantes que los ocupan generalmente, algunos adolescentes, que no están maduros ni preparados para estar allí. Y así se retroalimenta la cadena. Se aceleran los tiempos de maduración y evolución y luego se ven los partidos que se ven", dijo.

Metiéndonos de lleno en la Copa Argentina, el ex colaborador de José Pekerman en el proceso de Seleciones, expresó: "Me encanta la idea. En Italia y en España ha funcionado muy bien. En cuanto al costo a pagar por los equipos, sin lugar a dudas, tiene más para perder el que está más arriba en la tabla o categoría. Y el, supuestamente, inferior estará super motivado. Fíjate como revolucionó River la B Nacional. Hay equipos como Aldosivi o Defensa y Justicia que se potenciaron frente al Millonario y luego, a la fecha siguiente, no pudieron ganar de local. Dije supuestamente inferior porque el fútbol tiene de maravilloso desde lo psicológico, que no hay partidos fáciles, que siempre hay que jugarlos y que a diferencia de otros deportes podes empezar empatando y sostenerlo. Cosa que en vóley, tenis, básquet es imposible. Guardiola dice que hace mucho hincapié en la motivación del jugador cuando enfrentan al Levante, Almería, etc. Porque en los clásicos considera que el jugador se motiva solo".

Intentando espiar a la distancia, cómo se puede potenciar un equipo de menos recursos contra un grande, en la parte decisiva de la Copa, Roffe, expresó: "Me imagino que los entrenadores apuntarán a: es una oportunidad única, una vidriera, ellos tienen la presión, podemos quedar en la historia. Ojo! que un equipo inferior pero ordenado, comunicado dentro de la cancha, con un líder fuera y otro dentro, que sabe a qué juega y con fortaleza a la adversidad, puede darle un dolor de cabeza a más de uno. La Copa, tiene un compenente mental único porque encima es a eliminación directa".

En el tramo final de la entrevista, sin poner en riesgo su secreto profesional, le consultamos a Marcelo Roffe sobre los siguientes temas:

¿A qué apela Diego Maradona para levantarse siempre de las difíciles?

A su espíritu épico de héroe que se re-inventa.

¿Cómo ve el presente de Messi en la Selección?

El es el mejor sin dudas desde hace 3 años, pero a medida que carezcamos de líderes y no haya un equipo, lo busquemos como "salvador" y encima lo critiquemos, no lo podremos aprovechar ni disfrutar. El fútbol es un deporte de equipo. Nadie construye un edificio solo.

Hoy en día, este psicólogo especialista en atender los temas relacionadas con el deporte, da clases en universidades, ofrece cursos a entidades privadas y, desde su web www.marceloroffe.com trata de explicar lo que a veces es inexplicable en el mundo de la alta competencia.