“Por muchos motivos, la Copa que más recuerdo es la que jugué con All Boys en la edición 2012-2013. Le ganamos 3-1 a Boca en Catamarca, hice un gol y tuve el privilegio de enfrentar a un equipo que tenía a Carlos Bianchi como entrenador y a Juan Román Riquelme como jugador. Hicimos una gran campaña y tenía compañeros como Nicolás Cambiasso, Oscar Ahumada e Iván Borghello que estaban en un gran nivel. Fue mi anteúltimo partido en el club y me quedé con las ganas de seguir”.

“El partido con Boca fue uno de los últimos del primer semestre de 2013, se me vencía el préstamo y Aldosivi de Mar del Plata me compró el pase. Había cumplido el sueño de jugar en Primera y tuve que bajar de categoría. Fue un golpe fuerte, más que nada porque tenía el sueño de seguir adelante con All Boys en la Copa Argentina. Me fui yo, se fue Pepe Romero y se desarmó gran parte del plantel. Igualmente, pudieron llegar a Semifinales y eso es algo que recuerdo hasta el día de hoy”.

“Jugué la primera Copa Argentina con Colegiales y le hice un gol agónico a Comunicaciones para pasar de ronda y poder jugar 32avos ante Independiente en Salta. Obviamente no lo grité por respeto, aunque fue una alegría habernos clasificado al cuadro principal. Enfrentamos a un rival de mucha jerarquía, hicimos un buen primer tiempo, pero en el complemento nos superaron y terminamos perdiendo 4-0. Para la institución, fue histórico. Cada 23 de noviembre (día del encuentro) se festeja el Día del Hincha”.

“Con 36 años, me siento vigente. Quedamos afuera del Reducido con Comunicaciones, pero estoy conforme con mi nivel. Hice cinco goles, aunque es duro no tener posibilidades de pelear por un segundo ascenso a la B Nacional. Y más, teniendo en cuenta lo que hizo este equipo hace una temporada. Lo bueno es que estamos en crecimiento, se han potenciado muchos chicos de las divisiones inferiores y mi idea es seguir jugando para volver a pelear por subir. Si el cuerpo técnico y la dirigencia creen que soy útil, bienvenido sea”.