Del Argentino B a la Primera División con dos escalas y una participación en la Copa Argentina que le dio un gran impulso a su carrera. En 2012, la ilusión de Neri Bandiera pasaba por destacarse en Sarmiento de Resistencia para soñar con el salto a una categoría superior. A poco más de tres años de aquella temporada en la que su carrera tuvo un giro de 360 grados, el futuro inmediato lo encontrará en Aldosivi de Mar del Plata, conjunto de Primera División que lo buscó tras su buen paso por Juventud Unida de Gualeguaychú. A sus 26 años, y tras haber pasado por tres divisionales distintas, tendrá su gran prueba y no quiere desaprovecharla.

Algo le decía que los encuentros ante Arsenal y Racing por la edición 2011/2012 de la Copa Argentina no serían sus últimas experiencias ante conjuntos de Primera. Desde sus inicios, sus formadores le veían futuro y condiciones para llegar más allá del Argentino B. Captó la atención de Juventud Unida de Gualeguaychú, logró el ascenso a la B Nacional, y junto con el goleador Fernando Zampedri, fueron claves para que el equipo entrerriano se salve del descenso y logre el pase a la próxima edición de la competencia integradora. “Tuvimos una linda experiencia y me estuvieron viendo. Había algunos ofrecimientos pero no quería irme sin cumplir el objetivo de seguir en la categoría. Para mí, haberlo logrado y llegar a la Copa es una gran felicidad”, expresó el atacante, quien afirmó que no sintió el cambio entre la cuarta y la segunda categoría: “Me adapté rápido porque hay más espacios. Sé que ahora tendré que dar un salto de calidad para poder mantenerme”.

Aldosivi se interesó en él desde hacía meses y sus buenas actuaciones en la B Nacional terminaron de decidir a Fernando Quiroz, quien lo pidió para reforzar un plantel que tendrá desvinculaciones. Para Bandiera, la llegada a la Copa Sudamericana hubiera sido un incentivo más, aunque todavía le cuesta creer que desde 2016 vaya a ser jugador de Primera División: “Tengo ansiedad. El pase es mío y voy a ir a préstamo. Cuando arranqué en Sarmiento, esto lo veía muy lejano. El Argentino B es duro y no siempre llega a verse”. Aunque para él, lo que vivió su amigo Horacio Orzán fue un incentivo para creer que el sueño era posible: “Él anduvo muy bien, se destacó en la primera Copa Argentina y se lo llevó Newell’s. Hoy está en Tigre y su presente me llena de felicidad porque luchó mucho para esto”.

De la Copa 2011/2012 lo que le sobran a Bandiera son recuerdos gratos. El hecho de haber llegado a Octavos, enfrentar a Racing en Chaco, y eliminar a clubes de Primera son algunos de ellos. Sin embargo, nada se asemeja a haberle marcado un gol a Arsenal en cancha de Banfield, el día en el que fue titular y casi debe salir: “Venía con una distensión y en una de las primeras acciones me resentí. No quise salir y pude premiar el esfuerzo con un gol y la clasificación”. Desde otro lugar, también buscará pelear la Copa con Aldosivi, conjunto que nunca pudo llegar a las instancias finales: “Será un objetivo importante y no la descuidaremos. Todos los equipos la quieren ganar”.