La derrota en el clásico de Avellaneda ante Racing marcó la despedida de Jorge Almirón como director técnico de Independiente. En un principio, el ciclo brindó sus frutos con un equipo que se caracterizaba por la propuesta ofensiva y la contundencia en el área rival, pero la irregularidad, sobre todo en los partidos decisivos, le impidió pelear hasta el cierre del Torneo de Primera del año pasado e incidió en un arranque inestable del presente certamen (en la Copa Argentina, debió llegar a los penales para eliminar al humilde Alianza de Coronel Moldes). La realidad se estabilizó con el interinato de Fernando Berón, que arrojó un saldo de cuatro puntos sobre seis, y se acomodó definitivamente con Mauricio Pellegrino: seis victorias consecutivas que despertaron ilusión en los hinchas.

El cambio de estilo fue notorio, ya que el equipo prioriza la solvencia defensiva, las salidas rápidas y verticales y exhibe un mayor equilibrio. Martín Benítez fue la gran aparición, con cinco goles y actuaciones destacadas en cada partido; también levantó el nivel Jesús Méndez, Diego Rodríguez sostuvo los momentos complejos con atajadas brillantes y la dupla delantera conformada por Lucas Albertengo y Diego Vera, conocidos desde Atlético Rafaela, maneja los movimientos a la perfección. Olimpo, Temperley, Atlético de Rafaela, Colón y Defensa y Justicia padecieron el andar del Rojo en el Torneo de Primera y le permitieron escalar a la séptima posición, una unidad por debajo del último clasificado a la Liguilla Pre-Libertadores.

Además, Independiente pretender saldar la deuda histórica que tiene con relación a la Copa Argentina Sancor Seguros: nunca logró avanzar más allá de los Octavos de Final, instancia alcanzada en las últimas dos ediciones (perdió con Arsenal y Estudiantes de La Plata, respectivamente). El mencionado debut sufrido ante el conjunto cordobés precedió a un triunfo por la mínima diferencia sobre Deportivo Español que lo clasificó nuevamente entre los 16 mejores del certamen. Lanús, este miércoles desde las 18.30 y en el estadio Unico Ciudad de La Plata, es el escollo que separa al equipo de su mejor actuación en la competencia integradora.