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Abreu y sus marcas en la Copa Argentina

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Protagonista de un Rosario Central finalista de la competencia, el delantero uruguayo consiguió varios hitos durante la edición 2013-2014: marcó su gol 300 en el encuentro de Octavos ante Tigre y, en su partido 700 a nivel profesional, abrió el camino de la victoria contra Argentinos Juniors por la Semifinal. “Llegamos a la definición por convicción, dedicación y saber desde un principio la importancia que tenía este certamen”, valoró.

Rosario Central disputará contra Huracán la Final de la Copa Argentina Sancor Seguros 2013-2014. Un porcentaje importante de la llegada a la definición del certamen se debe a la sapiencia y el interminable olfato goleador de Sebastián Washington Abreu. El delantero colaboró con goles en los encuentros ante Juventud Unida de San Luis, Tigre y Argentinos Juniors, además de sentenciar la definición por penales contra River. Durante el camino, consiguió marcas personales que describen su trayectoria mayúscula: convirtió el gol 300 en el encuentro frente al Matador y, en la Semifinal, llegó a su partido 700 como profesional y abrió el camino de la goleada.

“Estoy contento, primero por haber llegado a la Final de una Copa después de 16 años (Conmebol 1998). Tener la chance de conseguir un título, con el significado que tiene para Rosario Central, y poder clasificar a la Libertadores es hermoso. En lo personal, llegar a la marca de 700 partidos  es un hecho brillante. Lástima por la lesión, que opacó el momento, pero está la felicidad por haber abierto el marcador y ayudar a un logro importante”, destacó el punta de 38 años, que dominó un centro con la frente y remató de volea para conseguir el primer tanto del 5-0 sobre Argentinos Juniors. Un tirón en el gemelo izquierdo opacó el momento de Abreu, que igualmente piensa en llegar a la definición.

Sebastián reconoció su aporte personal en la campaña de Rosario Central: “Sí, pude convertir en todos los partidos menos River, que me tocó definir la serie de penales. Me gusta disputar este tipo de encuentros, decisivos y en los que no hay un mañana. Muchos equipos quisieron ganar este torneo, con una clase de jugadores importantes que estuvieron presentes y quedaron en el camino. Así que somos privilegiados, vuelvo a repetir que es destacable el hecho de retornar a una final después de 19 años sin títulos (Conmebol 1995) y 27 si nos referimos sólo a nivel local (Campeonato 1986-1987). Es un logro del grupo para remarcar”. Para cerrar, describió las principales claves de uno de los finalistas de la Copa Argentina: “Llegamos a la definición por convicción, dedicación y saber desde un principio la importante que tenía este certamen”.

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