El comienzo de la era moderna de la Copa Argentina llegó para la temporada 2011-2012, con la idea principal de que participen los equipos de todas las categorías. El campeón de aquella edición fue Boca, que venció por 2-1 a Racing y logró consagrarse en el estadio San Juan del Bicentenario. El incentivo extra que tuvo el Xeneize por haber ganado el certamen fue, en ese entonces, la clasificación a la segunda fase de la Copa Sudamericana 2012.

La Copa Argentina creció en repercusión e importancia, sobre todo a partir de la decisión que se tomó para la edición 2012-2013. La misma consistía en que el campeón se clasificara a la Copa Libertadores y no a la Sudamericana, como fue en la temporada inicial. El primer equipo en obtener el cupo al torneo continental fue Arsenal, que logró coronarse en el certamen integrador, tras vencer por 3-0 a San Lorenzo, en Catamarca.

Aquella Copa Libertadores 2014 fue la última en la que participó Arsenal, que completó una buena actuación al meterse entre ocho mejores. En la temporada 2013-2014, la Copa Argentina tuvo como campeón a Huracán, que no sólo volvió a ganar un título después de 41 años sino que se dio lujo de participar por primera vez en el máximo torneo continental desde 1974. El triunfo por penales ante Rosario Central, tras un 0-0 en los 90 minutos, le permitió al Globo poder coronarse en San Juan.

El título en la Copa Argentina generó que Huracán pudiera vivir momentos inolvidables a nivel internacional, ya que jugó la Copa Libertadores 2015 y tuvo la oportunidad de disputar la edición 2016, por haber sido finalista de la Copa Sudamericana en el año anterior. En el ámbito nacional, el Globo ganó además la Supercopa Argentina correspondiente al año 2014, tras vencer a River en San Juan. Su clasificación a dicha final se debió también al título histórico en el certamen integrador.

Una situación parecida a la Atlético Tucumán le tocó vivir a Rosario Central en la edición 2014-2015, cuando se clasificó a la Copa Libertadores 2016 por haber sido finalista de la Copa Argentina, ya que Boca, que terminó siendo el campeón, se aseguró su lugar con antelación por consagrarse también en el torneo local. Ya en la pasada temporada, River obtuvo el título en el torneo integrador, tras vencer al Canalla en la Final, y se ganó el preciado pase al certamen continental, en un semestre en el que varios equipos grandes competieron por obtener ese premio.

Con el correr de los años, la Copa Argentina se convirtió en un clásico del fútbol argentino. Más allá de lo que significa a nivel nacional ganar un título en el que participaron clubes de todas las categorías, la clasificación a la Copa Libertadores es un premio motivador y seduce a la mayoría de los equipos. Atlético Tucumán será el quinto privilegiado en jugar el torneo continental gracias al certamen más integrador. En 2018 se escribirá una nueva historia y se renovarán las ilusiones, en una competencia que une a todo el país.