Matías Castro, del Ascenso y la Copa Argentina a la Sudamericana







El delantero de 22 años fue el goleador de Defensores de Cambaceres en la temporada pasada. Con el conjunto de Primera C peleó hasta el final por subir a la B Metropolitana, y llegó hasta la Fase Final I de la competencia integradora. Convirtió 19 tantos y acaparó el interés de Danubio de Uruguay, que lo sumó para ser titular en el torneo continental. Pese a que el elenco dirigido por Leonardo Ramos fue eliminado, el atacante marcó un tanto y mostró buenas credenciales.
La Copa Argentina tiene un valor sustancial para los futbolistas del Ascenso que, motivados por la posibilidad de enfrentarse a rivales importantes y de categorías superiores, elevan su rendimiento y generan la atención de esos equipos. Ocurrió con Horacio Orzán, quien saltó sin escalas de Sarmiento de Resistencia (Argentino B) a Newell’s, protagonista de competencias locales e internacionales. También pasó con Marcos Figueroa, delantero que pasó de jugar con Central Córdoba de Rosario en Primera C a defender las camisetas de Argentinos, Atlético de Rafaela y San Martín de San Juan. En esta oportunidad, el futbolista que cambió radicalmente su carrera es Matías Castro.
Atacante neuquino de 22 años, comenzó su carrera en la Comisión de Actividades Infantiles. Si bien se perfilaba como un gran proyecto de inferiores (llegó a debutar a los 17 años en la B Nacional), no tuvo mayores oportunidades y fue cedido a préstamo para jugar en El Porvenir. Pese al descenso de categoría sufrido por el equipo de Gerli, Castro se quedó en Primera C para jugar en Defensores de Cambaceres. Allí se produjo su explosión futbolística. Como centrodelantero en una formación 4-4-2, se complementó perfecto con Nicolás Kissner y se convirtió en el goleador del equipo en la temporada: 19 tantos entre el campeonato local y la Copa Argentina, certamen en el que le anotó por duplicado a Central Ballester.
El duro golpe causado por la derrota en la Final del Reducido para ascender a la Primera B Metropolitana (perdió 1-0 en el resultado global ante Deportivo Español) cerró el ciclo de Castro en Cambaceres. El interés por parte de instituciones importantes del país y del exterior derivó en la necesidad de alejarse del club de Ensenada. Aunque estuvo próximo a sumarse a Olimpo, finalmente se transformó en refuerzo de Danubio. Ya acumula cuatro partidos en el conjunto uruguayo, con el agregado de que debutó en la Copa Sudamericana: jugó los 180 minutos en la serie en la que el equipo uruguayo fue eliminado por Deportivo Capiatá de Paraguay, pese a que él marcó en la vuelta. Su gol en el estreno del torneo local (caída 4-2 frente a Racing) lo posicionó como pieza fundamental del conjunto dirigido por Leonardo Ramos.
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