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Una premiación acorde a una Final de primer nivel

Rosario Central 1 (4) - Gimnasia (LP) 1 (1) / Foto: Alejandro Del Bosco

Los planteles de Rosario Central y Gimnasia La Plata, así como la terna arbitral designada para el encuentro decisivo, recibieron las preseas correspondientes por el resultado de la definición de la Copa Total Argentina. La ceremonia se realizó en un clima ameno y con el respeto como principal característica.

La finalización del encuentro que Rosario Central y Gimnasia y Esgrima La Plata disputaron en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza se dio con la premiación como marco principal. Uno a uno, los jugadores de ambos equipos y los árbitros del encuentro recibieron su medalla por haber participado en el encuentro.

La ceremonia contó con las presencias de Claudio Tapia, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino; Ignacio Galarza, CEO de Torneos, empresa organizadora del certamen; Alex Ganly, director de Eventos de Torneos; Juan José Raga, director general de Total Argentina, main sponsor de la competencia; Diego Pizichini, director de Marketing de Chery, presentador del torneo integrador; y Federico Chiapetta, subsecretario de Deportes de Mendoza. Se inauguró con la subida al podio del plantel subcampeón del certamen. Encabezado por Fabián Rinaudo y Pedro Troglio, Gimnasia La Plata recibió las medallas plateadas por una campaña sobresaliente que fue reconocida por los aplausos desde la tribuna ocupada por su parcialidad.

Posteriormente fue el turno de la terna arbitral que tuvo como protagonistas a Patricio Loustau, Diego Bonfá, Ezequiel Brailovsky y Julio Barraza: fueron premiados con medallas de bronce por su labor en el encuentro disputado en el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza. El cierre llegó con los festejos de la delegación de Rosario Central, ganador de la presente edición. Las medallas de oro precedieron a la llegada del cheque de $4.920.000, entregado por Juan José Raga; y el premio mayor, el trofeo que une la tradición con la innovación, que se lo dieron Claudio Tapia e Ignacio Galarza al capitán Marco Ruben. Los fuegos artificiales acompañaron la euforia de un público que demostró sus sensaciones por estrenarse como campeón de la Copa Argentina y consagrarse después de 23 años.

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