La alegría del campeón en la noche cordobesa
Boca se coronó en la Copa Argentina tras superar a Rosario Central y sus jugadores vivieron una verdadera fiesta junto con los hinchas y el cuerpo técnico. Reviví los mejores momentos de la consagración del Xeneize.
El podio y la vuelta olímpica de Boca campeón
No hubo un solo jugador de Boca que se quiso quedar afuera del festejo. Confiados en que un nuevo título llegaría, quisieron invitar a familiares y allegados para que nadie se perdiera la fiesta en la noche cordobesa. La Copa Argentina era la excusa y el estadio Mario Alberto Kempes ofició como sede de una jornada que quedará en el recuerdo de cada uno de los futbolistas que participaron de la conquista del torneo integrador.
Una vez finalizado el encuentro, se desató la fiesta. Los futbolistas que participaron del encuentro se fundieron en un abrazo y luego de algunos minutos, se les sumaron los integrantes del plantel que no formaron parte de la lista de concentrados para el partido. A continuación, llegaron los familiares, y luego, el momento de la premiación. La misma se realizó entre risas e innumerables gestos de alegría y felicidad que tuvieron su momento de mayor extasis en un momento puntual: aquel instante en el que el capitán Daniel Díaz levantó el trofeo.
A continuación, llegó el momento de la vuelta olímpica. La misma se realizó con integrantes del plantel, cuerpo técnico, familiares y allegados que dsifrutaron de la posibilidad de ser campeones ante más de 30 mil personas que quieren volver a acostumbrarse a las vueltas olímpicas. El trofeo de la Copa Argentina fue el objeto de deseo de cada uno de los jugadores. Todos lo quisieron para una foto y casi todos tuvieron la posibilidad de cumplir el objetivo. La sonrisa y la felicidad del momento generaron que cada uno de ellos se prestara a las fotos para inmortalizar el momento. Ya sea con la seriedad de un Nicolas Lodeiro que posó besando la pelota que se llevó como regalo. O también, como Pablo Pérez y Andrés Chávez, quienes le pusieron humor al festejo con poses que reflejaron su alegría.
Carlos Tevez no dejó de sonreir. Se sintió con el deber cumplido. Fue campeón de los dos torneos que disputó desde su vuelta y se abrazó con cada uno de sus compañeros en señal de agradecimiento. Volvió para esto y levantó el trofeo con la seguridad de que los esfuerzos por devolverle la alegría al hincha de Boca dieron sus frutos.
Finalizada la fiesta en el campo de juego, todo continuó en la intimidad de un vestuario en el que sobraron las fotos con la Copa. Boca terminó el 2015 de la mejor manera y volvió a gritar campeón. De ahora en más, renovará sus objetivos de la mano de un plantel que quiere acostumbrarse a festejar.
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