La importante movilización de los hinchas de San Lorenzo
Entre este martes y el miércoles, más de 90 micros y siete chárters contratados por la Comisión Directiva llegaron a Catamarca para el duelo decisivo ante Arsenal que definió al campeón de la Copa. En ellos, además de hinchas, viajaron ilusiones y sueños que quedaron truncos por la contundente derrota. Igualmente, alentaron hasta el final y despidieron al equipo con una ovación.
Catamarca no sabía de espectáculos futbolísticos que trajeran consigo a los equipos más importantes de la Primera División hasta que llegó la Copa Argentina. Con ella, sueños, ilusiones y momentos que serán guardados entre los recuerdos más preciados.
San Lorenzo renació tras el arribo de Matías Lammens y Marcelo Tinelli. Se despertaron nuevas ilusiones y la institución, en su conjunto, propició un cambio que empezó en lo institucional y continúa en lo futbolístico. En algún punto, la historia reciente de Catamarca y la del conjunto de Boedo se entrelazan entre sí. Entre la expectativa de uno y los sueños del otro, se vivió un ambiente festivo que tuvo como epicentro la Final de la Copa Argentina.
La paz de la provincia se alteró por una verdadera marea azul y roja que copó las calles con una movilización que quedará en la historia. Como para que nadie se pierda la gran Final, la comisión directiva de San Lorenzo les vendió a sus hinchas pasajes en micro y avión a precios accesibles. La movida fue un éxito y el Valle se revolucionó con el público que sueña con un título tras seis años de sequía.
90 micros y siete chárters arribararon a la provincia este miércoles por la mañana, horas antes del partido que definirá al campeón de la Copa Argentina. Quienes fueron por vía terrestre partieron desde las sedes de Avenida de Mayo y Avenida La Plata en la noche del martes y viajaron más de 12 horas. Los afortunados que han conseguido pasaje para viajar mediante la vía aérea salieron el día de partido y llegaron a la provincia pasado el mediodía. De allí, se movieron todos en conjunto y empiezan a colmar el estadio Bicentenario desde las primeras horas de la tarde.
El escenario de la definición tuvo un marco acorde a la importancia del encuentro. San Lorenzo volvió estar a las puertas de la gloria tras una etapa con sinsabores y su gente empezó a vivir en primera persona una fiesta impresionante. Pese a la contundente derrota, alteraron sin parar hasta el pitazo final de Germán Delfino y ovacionaron a los jugadores que, entre lágrimas, fueron a recibir las medallas de plata por el subcampeonato. Sin duda alguna, los hinchas son merecedores de varios aplausos por el esfuerzo realizado para asistir al estadio Bicentenario.
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