San Lorenzo apuesta por la Copa Argentina y el Inicial
La eliminación sufrida ante River, por los 16avos. de la Sudamericana, le impedirá conseguir la ansiada Triple Corona. De todas maneras, el conjunto dirigido por Juan Antonio Pizzi intentará lograr los otros dos frentes en disputa durante este semestre.
Se acabó el anhelo de la Triple Corona. Pese a ser superior en el balance de los dos partidos, San Lorenzo no pudo quebrar la resistencia de Marcelo Barovero y quedó eliminado ante River en el debut de la Sudamericana. Ahora, las energías del equipo dirigido por Juan Antonio Pizzi quedarán enfocadas en el Inicial, torneo en el que se ubica dos unidades por debajo del líder Newell’s, y la Copa Argentina Sancor Seguros, certamen en el que se medirá contra Estudiantes de Buenos Aires en Semifinales.
La derrota por la mínima diferencia en el partido de ida (gol de Jonathan Maidana) generó que San Lorenzo salga al estadio Monumental con una postura ofensiva, similar a la propuesta en el encuentro del pasado domingo frente al mismo rival, pero por el Torneo Inicial. River, con la ventaja en el marcador, prefirió priorizar la solidez defensiva y apostar a la velocidad de Manuel Lanzini y Rodrigo Mora en los contraataques.
El mal estado del campo de juego, producto del riego intencional por parte de los cancheros locales, conspiró contra los intentos ofensivos de ambas partes en el inicio del partido. Gonzalo Verón fue el primer jugador en buscar una vía alternativa para llegar al arco rival: su remate de media distancia encontró una sólida respuesta de Barovero, el futbolista clave de la serie con sus atajadas. Acto seguido, Ignacio Piatti también probó la resistencia del arquero de River con una volea que se incrustó en sus manos.
Con la ejecución de la pelota parada como su recurso distintivo, Leandro Navarro tensó al Monumental con un tiro libre que se estrelló en el travesaño, recién comenzado el complemento. San Lorenzo era superior, pero no podía encontrar la manera de plasmarlo en el resultado, que seguía siendo favorable al Millonario.
En busca del gol necesario, Pizzi varió los intérpretes: Fernando Elizari, Leandro Romagnoli y Héctor Villalba reemplazaron a Julio Buffarini, Piatti y Verón, respectivamente. El joven delantero de las inferiores se encontró rápidamente mano a mano con Barovero, quien le tapó el remate con su pecho. En el rebote de esa jugada, Walter Kannemann desvió la trayectoria de la pelota con un cabezazo que tuvo destino de palo.
La desesperación se apoderó de los cuerpos de los jugadores visitantes, que ni siquiera pudieron anotar con un intento de Martín Cauteruccio, goleador del equipo en la temporada. Frustrado por no llegar a la igualdad, Pablo Alvarado cometió la irresponsabilidad de cabecear a Carlos Carbonero y ganarse la merecida expulsión. A esa altura, el destino de eliminación era prácticamente irreversible para San Lorenzo, un conjunto que nunca encontró la forma de vulnerar la resistencia de Barovero y se despidió raudamente dela Sudamericana, uno de sus tres objetivos.
La Copa Argentina Sancor Seguros y el Inicial aparecen en el horizonte de un plantel muy rico técnicamente y con las variantes necesarias para afrontar varias competencias de manera simultánea. Bajo la conducción de Pizzi, un técnico que supo convencer a sus dirigidos de proponer un estilo ofensivo y vistoso, San Lorenzo intentará cortar la sequía de seis años sin alzar un trofeo.
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