“Córdoba espera más este encuentro que un Argentina-Brasil”
Luis Artime conoce como nadie en Belgrano la sensación de un clásico ante Talleres. En la previa al encuentro de 24avos. de la Copa Argentina Sancor Seguros, el Luifa, máximo ídolo del Pirata, recordó los encuentros ante el rival de siempre y dejó su pálpito para el cruce de este miércoles, desde las 20.10 y en el estadio Mario Kempes.
La nota exclusiva con Luis Artime
"Hay una máxima dentro del fútbol que dice: 'los clásicos no se juegan, se ganan'. Eso es lo que pienso del partido del miércoles, hay que ganarlo como sea”. La oficina de Luis Fabián Artime, en la sede de Sancor Seguros que está ubicada en Córdoba capital, está decorada con distintas imágenes de su rica trayectoria como jugador. Una gigantografía de uno de sus tantos festejos como delantero de Belgrano, cuadros que le regalaron distintos hinchas del Pirata y un mural con un popurrí de fotos con la camiseta celeste le dan un toque distintivo al lugar donde trabaja el Luifa desde que se retiró en 2005.
“Debo ser uno de los pocos porteños que triunfó en Córdoba (risas)”, expresó Artime, nacido en Moreno hace 47 años. Tras pasar por Ferro e Independiente, llegó a Belgrano en 1992. Nunca pensó que terminaría siendo el máximo ídolo del Pirata, con cuatro pasos en el club que incluyeron un ascenso a Primera en la temporada 1997-1998. “Los goles en los clásicos contra Talleres me hicieron quedar marcado con la gente, ya que tuve la suerte de hacerle goles que sirvieron para ganar los partidos”, agregó.
El Luifa resaltó la importancia del clásico cordobés en el mapa futbolístico del país: “Este es uno de los clásicos más lindos que existe en el Interior. Está a la altura de Central-Newell’s, ya que Córdoba es una provincia que está detrás de Talleres y Belgrano, y se paraliza cuando juegan entre ellos. El calor de la gente es inigualable”. También reconoció que la Copa Argentina era la única posibilidad de que puedan volver a enfrentarse oficialmente. “La diferencia de categoría que existe actualmente entre los clubes genera que no sea tan fácil juntarlos. Este certamen da la posibilidad de que se vuelva a jugar un partido tan importante y para Córdoba es una fiesta. La gente acá espera más este encuentro que un Argentina-Brasil”, sentenció.
Un momento emotivo de la charla llegó cuando el ex delantero debió referirse a la sede del encuentro de 24avos. que se disputará este miércoles, desde las 20.10. Gracias a una votación lanzada por el diario La Voz del Interior, y una decisión del Gobierno cordobés, la tribuna Popular Sur del estadio Mario Kempes pasó a llamarse Luis Artime. “Es especial que se juegue en el Kempes, en el ex Chateau Carreras, nombre con el que se conocía en mi época de jugador. Sinceramente es un orgullo que esa cancha tenga una tribuna con mi nombre. Gracias a Dios pude estar vivo para presenciar ese homenaje, y generalmente estos hechos ocurren cuando ya no estás más”, destacó.
Cuando debió recordar un clásico, Luis no dudó y eligió dos encuentros en los que tuvo actuaciones sobresalientes. “Tuve la suerte de jugar muchos: ganar, empatar y perder, seguidillas positivas y negativas, pero siempre jugados a muerte. El primero que se me viene a la mente fue justamente mi debut contra Talleres. Ganamos 2-1 con goles de Monserrat y mío (descontó Darío Rivadero). Me acuerdo de ese porque convertí con el brazo roto, ya que cinco minutos antes de anotar, Catalino Rivarola, defensor rival, me levantó por los aires y caí todo roto. Salí de la cancha, entré vendado y entablillado, y la primera pelota que toqué la clavé contra el palo”, manifestó, señalándose la marca que aún tiene en la intersección entre su brazo y su antebrazo derecho.
“El restante es una famosa jugada del (Javier) Perro Arbarello, que gambeteó a varios hasta llegar a quedar cara a cara con Gustavo Irusta. El Mono le tapó el remate y para el rebote llegaba Barrios, por el lado de Talleres, y yo. Si bien él estaba más cerca de la pelota, me estiré y puse el 1-0 definitivo. Hasta el día de hoy no sé cómo llegué antes, fue una jugada inexplicable, como “la mano de Dios” de Maradona (risas)”, sostuvo, en referencia a otro clásico que lo tuvo como protagonista excluyente. Seguramente, deseará que algún jugador de Belgrano logre imitarlo este miércoles y le dé una nueva alegría a los simpatizantes del Pirata en el encuentro más importante de la provincia.
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