“Voy a enfrentar al equipo que me dio todo”
Enrique Narvay, delantero de Unión Aconquija, hizo las inferiores en Quilmes y tendrá la chance de jugar contra el club de sus inicios, por los 32avos. de Final de la Copa Argentina. El marplatense de 26 años se incorporó al conjunto catamarqueño en enero de 2016 y se ilusiona con la posibilidad de participar del encuentro ante el Cervecero.
El sorteo de los 32avos. de la Copa Argentina tuvo repercusión en los medios y también en los jugadores de cada uno de los equipos que participarán de la instancia. En su cuenta de Twitter, Enrique Narvay publicó una foto con los escudos de Quilmes y Unión Aconquija y una frase que dice “que lindo va a ser…”. El motivo de su expectativa se debe al cariño que le tiene al Cervecero, no sólo porque fue el club que le dio trascendencia como futbolista sino también por haber formado parte del plantel que ascendió a Primera en 2010. El delantero con actualidad en el conjunto catamarqueño habló con el Sitio Oficial sobre la posibilidad de poder afrontar este partido especial para su carrera.
“Voy a enfrentar al equipo que me dio todo. A los 15 años me fui de Mar del Plata para jugar en Quilmes, donde me formé como jugador. Hay mucha gente en el club que me aprecia. Es como mi segunda casa. Tengo muchos amigos. Este partido va a ser muy lindo para Aconquija y sobre todo para mí”, manifestó Narvay, quien debutó en el Cervecero en 2009 durante la B Nacional. Además, el delantero se refirió a la chance de volver a disputar la Copa Argentina: “Este torneo le da posibilidades a muchos equipos. A mí me tocó jugarlo sólo con Comunicaciones, en una instancia que perdimos con Morón. Esperemos estar a la altura. Va a ser un cruce emocionante”.
Narvay también recordó con alegría su etapa en Quilmes, el rival de Aconquija en la Copa: “Mis primeros partidos fueron en 2009. En ese momento me iba muy bien, pero había muchos delanteros. Tenía como compañeros a Mauricio Carrasco, (Ramón) Lentini, el Chino (Miguel) Caneo y el Colo (Facundo) Sava. En 2010 ascendimos con Vitrola (Jorge) Ghiso y también me tocó estar con (Hugo) Tocalli en Primera. Habíamos quedado ocho de aquel plantel. Garnier, Caneo, Trípodi, yo y cuatro más. En 2011 decidí no seguir más porque (Ricardo) Caruso Lombardi no me iba a tener en cuenta”, agregó.
Después de su buen paso por Quilmes, el delantero afrontó una mala experiencia en Europa: “Tuve un representante que me manejó mal y me fui a jugar a Bélgica con una expectativa que no era. Por suerte me surgió la posibilidad de ir a Israel. Pero estuve justo en el medio de la guerra en el último semestre de 2011. Decidí volver a la Argentina porque no la estaba pasando nada bien”. En su retorno al país, le surgió la chance de incorporarse a San Martín de Mendoza en el Argentino B y después a Rivadavia de Lincoln en el Argentino A.
La carrera de Narvay continuó en Carapeguá de Paraguay, Guaraní Antonio Franco de Misiones y Comunicaciones, hasta que contó con la chance de emigrar a Perú para jugar en Sport Huancayo, que tenía al Profe (Daniel) Córdoba como entrenador. “Me estaba yendo bien hasta que me rompí los ligamentos cruzados a finales del torneo de 2014. La recuperación me llevó diez meses. Antes de volver a la Argentina, estuve en Fernando de la Mora de Paraguay en el último semestre de 2015”, comentó el marplatense, que también hizo inferiores en Aldosivi, Alvadaro, Unión y Almagro Florida de la misma ciudad.
A principios de 2016, Narvay se transformó en refuerzo de Unión Aconquija, ya que el técnico Víctor Riggio lo conocía de su etapa en Quilmes y en Rivadavia de Lincoln. “Soy delantero, pero el entrenador me pone como carrilero por derecha o por izquierda. Estuve jugando hasta que empecé e sufrir problemas con la rodilla. Se me ha sobrecargado el cuádriceps. Pero ahora estoy entrenando con normalidad. Espero poder rendir de la mejor manera y ser partícipe del partido por la Copa Argentina”, sentenció el ex futbolista de 26 años.
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