Damián Martínez empujó el penal de la clasificación con un soplido
El joven defensor de San Lorenzo de 22 años convirtió el disparo que decretó el 5-4 definitivo ante Barracas Central. “Esperemos ganar el clásico con River. Hay que hacer las cosas bien para seguir en la Copa y llegar hasta la Sudamericana”, dijo.
Damián Martínez, lateral derecho del Ciclón y hermano de Adrián, el volante que también estuvo entre los titulares en la cancha de Argentinos, metió el remate más importante de la definición. Encima, su impacto ingresó con suspenso, ya que pegó en los dos palos y luego entró. “Soplé un poquito mi penal para que entre. Había pateado algunos penales en reserva”, aclaró.
Además de haberle dado la clasificación a su equipo, surgió de las divisiones inferiores azulgranas. Cuando estaba en la Quinta, fue convocado por Walter Perazzo para participar del Sudamericano Sub 20 en Perú 2011. Entre otras declaraciones referidas al pasaje del conjunto de Ricardo Caruso Lombardi a Cuartos, agregó: “Sabíamos que Barracas iba a ser muy duro”.
Con respecto al rendimiento del rival en el desarrollo del juego, expresó: “Nos empataron merecidamente en el segundo tiempo. Ellos mejoraron y nos llegaron. Nosotros nos metimos un poco atrás”. Más allá de los hermanos Martínez, hubo otro futbolista con el mismo apellido que formó parte del once inicial. Se trata de Diego, quien justamente falló el único penal del Santo.
En la próxima instancia, San Lorenzo se verá las caras con el equipo de Matías Almeyda. “Con River será un partido lindo. Esperemos ganar el clásico”, cerró Damián Martínez, el hombre que le dio la máxima alegría al cuadro de Boedo.
Arriba
