Casi de casualidad
Cristian Rami, actualmente en Sportivo Italiano, se transformó en jugador sin proponérselo. El cordobés de 31 años nunca imaginó vivir del fútbol. Sin embargo, luego de destacarse en los torneos intercolegiales, lo llevaron a jugar a Talleres de Córdoba. Lo puso en Primera Ricardo Gareca, de presente en Vélez, y luego pasó por 7 equipos de la Argentina y el exterior.
El contenido del sueño del pibe nacido en suelo argentino, despierta en un potrero y se materializa en Primera División. Por lo general, el muchacho de la película lucha contra la adversidad y llega a la cima reinventándose a sí mismo. Pero como toda norma tiene excepciones, la historia a continuación alimenta la regla.
Cristian Rami, de 31 años y actualmente en Sportivo Italiano, hizo sus primeros goles en los intercolegiales de su Córdoba natal. Lejos de imaginar su futuro ligado al fútbol, Cristian describió como llegó a ponerse la camiseta de Talleres de Córdoba: "La verdad nunca pensé en jugar al fútbol profesionalmente. En aquella época solo me bastaba con divertirme". Haciendo memoria, agregó: "Un día el profesor José Danguice, que además trabajaba en las inferiores de Talleres, me invitó a jugar en ese club. Llegué a la edad de Décima y, cuando menos lo esperaba, Ricardo Gareca me citó para jugar en Primera. Es más, en ese momento, había empezado la carrera de ingeniería en sistemas y hacía las dos cosas a la vez. Después de un semestre agotador, en el que me levantaba a las 6 de la mañana y terminaba a las 8 de la noche fusilado, me decidí por el fútbol".
Lejos de soñar con ser tapa de los diarios, el goleador de Italiano recibió las primeras instrucciones de la mano del Tigre, hoy uno de los técnicos de mayor prestigio en el medio: "Recuerdo que en ese momento él trabajaba mucho en lo táctico. Ponía énfasis en el orden y pensaba siempre en el arco de enfrente". dijo con convicción.
Rami, que no imaginaba vivir del fútbol, paradójicamente, se transformó en un “trotamundos” de ese deporte. En Argentina, además de la camiseta de Talleres, vistió las de Atlético Tucumán y Racing de Córdoba. En la mitad de su carrera y, en pos de probar suerte en el exterior, desembarcó en el fútbol galo. En 2005 jugó en el Angers, equipo de Segunda División, y se dio el lujo de dejar afuera al Olympique de Marsella en la Copa Francia. Más tarde, en 2008, terminó la travesía en el Olympiakos Volos de la Segunda División de Grecia. De regreso al país, paseó su fútbol por Unión de Santa Fe, Tiro Federal y Boca Unidos de Corrientes. Actualmente defiende los colores de Sportivo Italiano en la B Metropolitana, donde es el goleador del equipo con 5 goles. Los dirigidos por Pascutti, con 21 puntos y lejos del líder Brown de Adrogue, están en plena recuperación después de un comienzo para olvidar. En la Copa Argentina, en tanto, vienen de superar a Temperley con gol suyo y a Godoy Cruz de Mendoza, equipo que jugará la Copa Libertadores de 2012, por penales.
El presente del goleador y el sueño por cumplir en estos días pasa por ascender con Italiano y seguir haciendo ruido en la Copa Argentina: "Mirá, nosotros vamos de menor a mayor. El objetivo nuestro es pelear por cosas importantes. Hoy estamos en la lucha por ingresar al reducido y en la Copa venimos de ganarle a un equipo de Primera".
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