"Esta Copa siempre me quedará grabada"
La vida da revancha. Mario Cejas fue el enganche estrella de Policial en la Copa Argentina. Le marcó un golazo al estilo Messi a Instituto, su primer club, en una histórica victoria que él no olvidará.
Ezequiel Lavezzi, Pablo Zabaleta y Ángel Di María, entre otros, recordaron su participación en copas nacionales. La Copa Argentina ya tiene historias que quedan guardadas en la memoria como le sucede a Mario Cejas, enganche de Atlético Policial de Catamarca.
Daniel Tilger lo apodo “El Messi Negro”. Tiene 27 años, y anotó el tercer gol ante Instituto. Dicen que la vida da revancha. La Gloria fue su primer club en el fútbol profesional: no pudo brillar como esperaba, pero la vida le dio una posibilidad de reivindicarse.
“Esta Copa siempre me quedará grabada en mi mente. Significaba casi como una revancha. Con Rodrigo Cervetti (arquero de Insituto) fuimos compañeros y recordamos esos viejos tiempos. El gol fue muy lindo y no me lo voy a olvidar. Por suerte pude aportar para la historia de Policial”, relata Cejas.
Mario Cejas nació en Recreo, ciudad de 10 mil habitantes, que se ubica a 206 kilómetros de San Fernando del Valle, capital de la provincia de Catamarca. Su historia es larga y trabajosa. El club en el que jugaba en su pueblo fue desafiliado, pero enseguida fue observado por Ernesto “Carucha” Corti, quien lo llevó a Instituto de Córdoba. Allí hizo todas las Inferiores hasta saltar a Primera desde la quinta división gracias a Gerardo “Tata” Martino, responsable de su debut.
“Fue una muy linda experiencia porque gracias al Tata cambié mi posición en la cancha. Arranqué jugando como volante por izquierda y él fue quien me puso de media punta y enganche porque decía que me gustaba mucho el arco. Aprendí mucho en ese tiempo porque los referentes como “Chiquito” Benítez, Mauro Amato y Claudio Sarría me hablaron mucho”, confiesa.
Parecía que la gran posibilidad iba a llegar en su carrera, pero el destino lo hizo deambular, por diferentes motivos, en muchos clubes nacionales y extranjeros. La experiencia que más recuerda está relacionada con los mismos colores que hoy defiende: azul y amarillo.
“Carlos Granero, representante de jugadores, me llevó a Boca y entrené durante dos semanas junto a Jorge Griffa, quien me dijo que había muchos chicos como yo. No pude tener la suerte de quedarme”.
El camino lo dejó en la vía, sin poder concretar su mayor sueño de triunfar en el fútbol grande. Pasó un tiempo por Belgrano de Córdoba, aunque una pubialgia lo marginó de las canchas. Con distintos destinos desde 2005, jugó en Atlético Policial y fue la gran figura de un equipo que fue la sensación de la Copa.
“Es el jugador distinto. Es igual a Messi, pero morocho. Lo cargo y le digo que es nuestro ´Messi negro´. Tiene muy buen manejo de la pelota, hay que saberlo llevar porque ayuda mucho para que Policial haya logrado estos buenos resultados”, destaca su compañero, Daniel Tilger, quien jugó en el equipo catamarqueño.
“El partido frente a Instituto estaba complicado y pensé en ponerlo para ganarlo porque sé de las capacidades técnicas que tiene para desequilibrar. Es un gran jugador”, apuntaba Ángel Bernuncio, entrenador de Poli.
El destino parece que le dio una revancha. Aunque por dentro, no pierde la esperanza de tener una nueva oportunidad para triunfar en el fútbol grande.
“Todo pasó muy rápido en mi vida. Encima, muchos problemas familiares se sumaron a la falta de suerte. Pero creo que me faltaron personas que me aconsejen mejor. En el fútbol se te acerca mucha gente que a veces no te quiere ayudar. Es difícil mantenerse sin otro trabajo como le pasaba a algunos compañeros del plantel. Ojalá pueda tener otra chance para triunfar. Me faltaría tener un poco más de suerte para dar un salto importante. Igual esta Copa me dio una alegría enorme”, concluye y recuerda Mario Cejas, “el Messi catamarqueño”.
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