Atlético Tucumán goleó a Sarmiento de Junín en Salta

Fueron 34 minutos de paridad. El zurdazo de Hernán Hechalar, a la salida de un tiro libre, derrumbó el planteo táctico efectivo que sostenía Sarmiento de Junín ante Atlético Tucumán. El Decano se agrandó con la ventaja parcial y, mediante las definiciones de Ismael Blanco, David Barbona y Alejandro Melo, sentenció una goleada por 4-0 en el estadio Padre Martearena de Salta. El conjunto dirigido por Ricardo Zielinski emuló la mejor actuación en la Copa Total Argentina (en la temporada 2011-2012, cayó por penales ante Racing en Cuartos de Final) y espera por Huracán - Vélez para conocer a su siguiente rival.

Hasta esa definición del delantero que había recibido el Premio Total como figura del encuentro anterior ante Independiente, Sarmiento contrarrestaba el dominio de la pelota que ejercía Atlético Tucumán. Fernando Quiroz propuso dos líneas de cuatro futbolistas que se paraban en campo propio y, al recuperar la pelota, intentaban salir con velocidad de contraataque. Durante ese lapso fue destacada la labor de Nicolás Miracco como pivote, ya que el delantero se las ingenió para aguantar la pelota ante los defensores rivales y habilitar a sus compañeros. Nicolás Rinaldi llevó cierto riesgo con un remate desviado.

Sin embargo, llegó el gol de Hechalar y se despertó Atlético Tucumán, que acumulaba tres derrotas y un empate en el estadio Padre Martearena (sólo había obtenido un triunfo en la primera edición al superar por 3-2 a Estudiantes de Buenos Aires). El Decano estiró rápidamente la diferencia a partir de un centro de Barbona que conectó Blanco de cabeza y, sobre el final de la etapa, estuvo próximo a disfrutar de un gol brillante: Rodrigo Aliendro estrelló una rabona en el palo que hubiese generado el delirio de los miles de hinchas que viajaron a Salta para presenciar el encuentro de Octavos de Final.

La superioridad se agudizó en el complemento, con un nuevo tanto de Atlético Tucumán. Blanco intercambió los roles con Barbona y lo asistió para sellar la clasificación a los Cuartos de Final por segunda vez en la historia. Sólo quedó tiempo para la expulsión de Ramiro Arias, un ejemplo del desorden y la impotencia sufrida por el equipo de Junín, que no podrá clasificarse entre los ocho mejores equipos de la competencia que une la tradición con la innovación; y para la definición del ingresado Melo, refuerzo arribado desde Nueva Chicago en el presente mercado de pases que anotó su primer tanto en el Decano.