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La Copa les da revancha

Independiente (M) acumula ocho partidos sin victorias. Gentileza: Diario Uno de Mendoza

Los cuatro equipos que protagonizarán la jornada de miércoles por la competencia integradora atraviesan una racha sin victorias: Gimnasia de Jujuy y Estudiantes de Buenos Aires (se medirán a las 21, en Salta) llevan tres encuentros sin ganar, mientras que Independiente de Rivadavia y Almirante Brown, que se enfrentarán a la misma hora en San Juan, no triunfan hace ocho y once encuentros, respectivamente.

Continúa la Fase Final II de la Copa Argentina. En esta oportunidad, saldrán a la cancha cuatro equipos que transitan un momento complicado en sus respectivas temporadas. Gimnasia de Jujuy, que ocupa puestos de descenso en la B Nacional, enfrentará a Estudiantes de Buenos Aires, de irregular rendimiento en la B Metropolitana; en el otro cruce, Independiente Rivadavia y Almirante Brown, dos equipos que también penan por mantener su plaza en la segunda categoría, buscarán cortar una prolongada racha sin obtener victorias.

El Lobo hilvanó cuatro victorias en cadena y parecía que saldría de la zona baja de la tabla de promedios. Sin embargo, dos empates y una derrota complicaron nuevamente su permanencia en la categoría. La paradoja está en que su campaña de 46 puntos le permite ubicarse a seis puntos de Instituto, el conjunto que ocupa la última plaza de ascenso a Primera. Después de empatar 1-1 contra San Martín de San Juan, los dirigidos por Mario Sciacqua viajarán a Salta en busca de su primer triunfo en la historia de la Copa (cayeron 1-0 ante Sarmiento de Resistencia en la temporada 2011-2012 y por penales contra Atlético Tucumán en la edición pasada).

Al margen del estreno con victoria en la competencia integradora (derrotó por 1-0 a Sportivo Belgrano), Estudiantes de Buenos Aires no realizó una campaña acorde a las expectativas en la B Metropolitana. Solamente consiguió ocho triunfos en 34 presentaciones y sus 37 puntos lo depositaron en el sector inferior de la tabla de posiciones. La derrota con Deportivo Armenio quebró una racha invicta de seis partidos que le había permitido esbozar una leve recuperación, motivada por la clasificación en la Copa. Semifinalista en la edición anterior, intentará conseguir un nuevo logro en la competencia este miércoles, desde las 21, en el estadio Padre Martearena de Salta.

El histórico triunfo ante Independiente le daba a la Lepra mendocina la oportunidad de entrometerse en la lucha por el ascenso a Primera. Pero, cinco empates y tres derrotas imposibilitaron cualquier atisbo de ilusión en los simpatizantes del conjunto dirigido por Roberto Trotta. La realidad volvió a situar al equipo en el objetivo primario de mantener la categoría: le lleva cuatro puntos a Aldosivi y Almirante Brown, equipos que deberían jugar un desempate para dirimir el último descenso. Justamente el Mirasol será su rival en el primer partido por la Copa Argentina, un certamen en el que buscará quebrar la maldición de los penales: fue eliminado por esa vía en las ediciones anteriores.

Ni siquiera las llegadas de Felipe De La Riva como entrenador y Daniel Bazán Vera en el rol de manager sirvieron para paliar la crisis de Almirante Brown, que acumula 11 partidos sin victorias desde el agónico 2-1 a Villa San Carlos. Con cinco empates (cuatro consecutivos) y seis derrotas, el Mirasol se hundió en puestos de descenso y, si el torneo finalizara en este momento, debería disputar un desempate ante Aldosivi para salvar la categoría. De todas maneras, las recientes igualdades ante Independiente y Defensa y Justicia, protagonistas de la B Nacional, pueden iniciar la recuperación futbolística del equipo de Isidro Casanova que, este miércoles desde las 21 y en San Juan, se enfocará en su estreno en la Copa Argentina. 

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