Juan Carlos Lescano tiene 27 años y un pasado destacado en la Copa Argentina. La jugó en las primeras dos ediciones con la camiseta de Central Córdoba de Rosario y supo formar parte de un equipo que es recordado por haber eliminado a Rosario Central en la temporada 2012-2013, cuando el Charrúa militaba en la Primera B Metropolitana. El volante, que hizo el primer tanto de aquel 2-1 conseguido en Chaco, también supo enfrentar a Boca y tiene un pasado en River. En la actualidad, defiende la camiseta de Ferrocarril Midland, conjunto que enfrentará a Talleres de Córdoba en los 32avos. de Final de la competencia integradora.

“Me acuerdo mucho de ese partido con Rosario Central. La realidad es que había mucha diferencia en cuanto a nombres, pero no en lo futbolístico. Les ganamos y después perdimos con All Boys”, recordó Lescano, quien también había disputado la primera edición: “Eliminamos a Boca Unidos de Corrientes, que venía en un buen momento y le había ganado a River días antes en la B Nacional. En 16avos pudimos jugar contra Boca, pero perdimos 2-0 en San Juan”.

Años después de aquellas actuaciones, Lescano volverá a la Fase Final de la Copa Argentina. Integra el plantel de Ferrocarril Midland, clasificado a 32avos por haberse destacado en la Primera C y que tendrá su segunda experiencia en el cuadro principal tras medirse con Quilmes en la edición 2012-2013. El ex Central Córdoba, que también pasó por Chile, Ecuador y Perú, será parte del equipo que enfrentará a Talleres de Córdoba. “Yo llegué al club a principios de año, cuando la clasificación a la Copa estaba casi consumada. Sabemos que tendremos enfrente a un equipo que es uno de los mejores del país. La realidad es que será difícil, pero confiamos en hacer un buen papel”, remarcó.

Tras sus actuaciones destacadas en la temporada 2011-2012, que finalizó con el ascenso de Central Córdoba a la B Metropolitana, Lescano tuvo la propuesta de River entre manos y vivió la experiencia de entrenar allí durante varios meses. Fue parte de un plantel que contaba con numerosas variantes en los puestos de ataque y no logró convencer al entrenador Matías Almeyda. “Si hoy tuviera que elegir, iría a Ferro”, sentenció quien también había sido contactado por el conjunto de Caballito, pero eligió a mudarse a Núñez, seducido por la posibilidad. “Cuando sos joven no lo pensás. Lamentablemente no tuve chances, pero rescato la experiencia. Era una posibilidad que no esperaba y la disfruté al máximo mientras duró”, agregó.