Historias de vida

De la selección de sordos a la Copa Argentina

Ricardo Mestre, actual goleador de la Selección Argentina de sordos, forma parte del plantel de Independiente Villa Obrera, de San Juan. El equipo cuyano debutará en la Copa Argentina Sancor Seguros frente a Atenas Pocito, este miércoles a las 22, en el estadio Del Bicentenario, y tendrá a su delantero como ejemplo de superación.

La escena la muestra el entrenamiento de Independiente Villa Obrera, de San Juan. Distintos momentos de la práctica lo encuentran tirando paredes, definiendo con precisión frente al arco y haciendo señas para llevar el juego del equipo lo más arriba posible. Cuentan que en el momento de la charla técnica, es el más concentrado a las indicaciones que salen de los labios del entrenador. Historia que parecería común a cualquier futbolista profesional. Pero el de Ricardo Mestre no justamente un relato de los que abundan. El centrodelantero, de 29 años, es sanjuanino y nació con un profundo grado de hipoacusia.

Una deficiencia del 90% de su capacidad auditiva lo llevó a mudarse a la Capital Federal cuando tenía dos años, donde permaneció hasta los 14 y junto a su hermano (también sordo) concurrieron a una escuela especial. Se inició en Sportivo Desamparados y, soportando con altura su problema auditivo, construyó una historia de empuje por superarse y destacarse en el deporte que lo apasiona: el fútbol. “Tiene una mirada sabia y una velocidad mental que supera la media”. Así definió las virtudes del goleador del silencio el actual coordinador de fútbol Independiente Villa Obrera, Santos Gaetán, que en el pasado lo dirigió y juntos obtuvieron el subcampeonato de la Liga Local en 2011. En dicho torneo, Ricardo convirtió 15 goles en 26 partidos.

Cuando Mestre volvió a San Juan encontró en el fútbol su lugar en el mundo. En la actualidad, se destaca en la Selección Argentina de Sordos, con la que participó de dos Paralímpicos, una eliminatoria mundialista y tres Panamericanos, anotando 26 goles con los colores celeste y blanco. En su extensa carrera vistió los colores de Desamparados (dueño de su pase), Marquesado, Atenas de Pocito y Aberastain. Cada vez falta menos para su debut en la Copa Argentina con la camiseta de Independiente Villa Obrera (SJ). Los "Villeros" enfrentarán el miércoles a las 22 a Atenas de Pocito, en el estadio del Bicentenario, por la Fase Preliminar Regional I.

Con respecto a las características técnicas del delantero, campeón con la Selección Argentina de sordos en los juegos panamericanos de Buenos Aires 2003, el entrenador José Bravo describió: “Tiene movimientos parecidos a los de Penco. Es muy vertical y agresivo. No da una pelota perdida y te obliga al error. Le gusta ir por afuera y tiene sentido de la oportunidad”.

Mestre puede hablar perfectamente, pero su capacidad auditiva es muy reducida. La lectura de labios es su herramienta para entender lo que le dicen los demás. Con audífonos puede escuchar un 30%, pero no los utiliza para entrenar o los partidos debido al elevado costo. Al delantero nada lo detiene en su sueño por superarse y la Copa Argentina le dará la oportunidad de destacarse.  En una entrevista con el sitio interiorfutbolero.com.ar, Mestre explicó que "por suerte tuve una educación en la cual me enseñaron a hablar y leer los labios cuando una persona habla. Pero por ejemplo, hay chicos de la Selección que solo hablan con lenguaje de señas entonces con ellos me comunico así. Me manejo de las dos formas". En la misma nota, comenta: "Cuando hago un gol, no hay nada mejor que ver festejar a todos de pie, sonriendo con las manos en alto. Es hermoso". 

Para Mestre, no escuchar nunca fue un impedimento. Enfrentó seriamente la adversidad y convive con ella. Convierte tantos y desaira defensores como cualquier delantero. Liberándose del problema que le impuso la vida. Su historia se inscribirá en la Copa Argentina. Y su nombre representará el ejemplo de los que pueden superar vallas por más alto que se fije el listón. Un gol al destino.

 

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