Brown de Adrogué volverá a la Fase Final de la mano de Pablo Vicó. Un técnico que a lo largo de los años, ha sabido transformarse en un ídolo indiscutido para la institución. Porque cuando él llegó, el Tricolor merodeaba en la B Metropolitana sin un rumbo certero. Con su arribo, el proceso de cambio llegó y dos ascensos a la B Nacional certifican que a su era le sobran momentos de alegría absoluta. A eso le suma que de su mano, el conjunto del Sur de Buenos Aires llegó dos veces a la Fase Final de una Copa Argentina en la que volverá a participar a partir de 2016.

El conjunto de Vicó volvió a la B Nacional a fines de 2015 y consiguió una victoria en cinco presentaciones (3-2, ante Juventud Unida, en Gualeguaychú). Al entrenador no lo alarma la escasez de triunfos y atribuye esto a un período de adaptación que el club debe tener en la categoría: “Creo que el balance es positivo. Quizá, nuestro mayor déficit pase por no concretar las situaciones que generamos. Nuestro objetivo es sumar puntos para mantener la categoría y creo que vamos por el buen camino”. Y agregó, confiado frente a lo que se vendrá, que “estamos viviendo un período de transición y es normal tener dificultades. Con el paso de los partidos se verá para qué estamos”.

“¿Cuál fue el momento en que Brown dio un salto de calidad? Creo que durante los últimos años, siempre buscamos ser protagonistas y eso se vio reflejado en los resultados”, destacó Vicó, quien fue clave para que el club de Adrogué haya conseguido dos ascensos a la B Nacional. Pese a que en el medio sufrió una dura vuelta a la B Metropolitana, el entrenador decidió seguir adelante y reestructuró un plantel que supo recomponerse durante todo el 2015: “Fuimos el único equipo que descendió sumando 51 puntos. Fue injusto, pero nos preparamos para volver y lo conseguimos. Hubo un gran mérito del cuerpo técnico, jugadores, dirigentes y también hinchas, que siempre apoyaron”.

La Copa Argentina será el otro gran desafío de Brown para 2016. El Tricolor acumula dos experiencias en la Fase Final. La primera de ellas, en la temporada 2012/2013, quedó trunca luego de una derrota con All Boys en Catamarca: “Pienso que si volvemos a jugar con un rival de Primera, vamos a estar más preparados. Aquel partido fue único y nos dio motivación para demostrar que podíamos estar a la altura”. Sobre la nueva experiencia que vivirá el Tricolor, destacó que “estar entre los mejores del país es un privilegio. Y más en un certamen tan lindo y competitivo. Uno siempre sueña con llegar lejos”.