Excepto por la primera edición, cuando fue sorprendido por Deportivo Merlo en 16avos, Estudiantes de La Plata cuenta con el privilegio de haber clasificado siempre entre los ocho mejores de la Copa Argentina Sancor Seguros. A su vez, nunca pudo superar esa instancia: All Boys y Huracán lo dejaron en el camino en las temporadas anteriores. Leandro Desábato es el principal referente de un conjunto que buscará cortar la racha este miércoles, en San Juan, cuando se mida con Rosario Central.

“Sabemos que estamos a tres partidos de ganar el certamen, pero es más difícil de lo que se cree. En la Copa van quedando los mejores equipos”, expresó Desábato, defensor de 36 años que surgió en el Pincha y debutó como profesional en 1997. Le costó adaptarse en su primer ciclo y debió transitar etapas en Olimpo, Quilmes y Argentinos Juniors hasta su retorno en 2007. Allí fue cuando integró distintos planteles que pelearon compromisos importantes y llegaron a su pico de rendimiento en el título de la Libertadores 2009 y en la Final del Mundial de Clubes de ese año, cuando perdieron en suplementario ante Barcelona. El título del Apertura 2010 fue la otra gran alegría del marcador central en su carrera, también con la camiseta del conjunto platense.

Después de derrotar a Santamarina, San Martín de San Juan y Quilmes, Estudiantes sostendrá un cruce interesante ante Rosario Central, otro club de auspicioso presente. “Tenemos que tratar de estar a la altura de las circunstancias, es una final de 90 minutos”, valoró sobre el encuentro que se disputará en el estadio Del Bicentenario, desde las 19.30. La ilusión del equipo dirigido por Gabriel Milito también se concentra en el Torneo de Primera, que lo tiene como integrante del lote de aspirantes a la Liguilla Pre-Libertadores: se ubica octavo, dos puntos por debajo de Banfield, que ocupa la sexta y última plaza. “Primero era importante ganarle a Vélez por el campeonato y ahora debemos repetir ante Rosario Central para seguir en la Copa”, sentenció sobre el triunfo por 1-0 en el estadio José Amalfitani, con gol de Ezequiel Cerutti, que les genera motivación para afrontar el compromiso por el certamen integrador.